El aumento en el trabajo de proyectos ha sido una tendencia durante mucho tiempo y solo parece estar acelerándose. Los principales impulsores de los cambios han sido la digitalización y la disponibilidad mejorada de varias herramientas de gestión del trabajo. En el pasado, las grandes empresas tenían sistemas internos pesados y costosos, pero hoy en día, en el mundo de los negocios, puede depender únicamente de los servicios en la nube y es posible que ya no tenga sus propios servidores.
La gestión de proyectos se refiere a las acciones tomadas para organizar y administrar los recursos de una manera que contribuya a la finalización exitosa del proyecto.
¿Qué es un proyecto?
Hay varias definiciones diferentes de un proyecto, pero todas tienen en común que un proyecto tiene un principio y un final. Un proyecto consta de una o más funciones interconectadas. El proyecto tiene una meta u objetivo definido, el cual debe lograrse en un tiempo determinado, con un presupuesto determinado y de acuerdo a unas definiciones determinadas.
Vale la pena hacer una distinción clara entre un proyecto y un proceso. Un proyecto no es repetitivo, como un proceso, sino que un proyecto es un trabajo que se realiza una vez. El proyecto también tiene un tiempo predefinido en el que debe implementarse, mientras que el proceso de alguna manera vive continuamente.
¿En qué consiste el proyecto?
Un proyecto es por tanto un conjunto de actividades o elementos a los que se les asigna un orden determinado. Por lo general, el final de una actividad es el comienzo de otra, pero no siempre es así. El proyecto también tiene un fin y un comienzo definidos. El proyecto siempre es único y no se ha implementado antes ningún proyecto similar con los mismos objetivos y recursos. Tampoco se implementará un proyecto idéntico en el futuro, aunque a menudo aparecen similitudes. Aún así, es bueno tener en cuenta que las funciones del proyecto a menudo requieren experiencia, juicio y creatividad y, por lo tanto, no es posible copiarlas o repetirlas como tales.
El objetivo del proyecto es lograr el objetivo acordado de acuerdo con los recursos y especificaciones asignados al proyecto y alcanzar la funcionalidad y calidad predefinidas.
¿Por qué el proyecto?
Las razones principales son la flexibilidad y el dinamismo. Se puede recolectar una cierta cantidad de recursos para el proyecto, es decir, se puede establecer un presupuesto o se puede designar una cierta cantidad de empleados para llevar a cabo el proyecto.
Cuando se completa el proyecto, es fácil dirigir los recursos a otras necesidades y tareas. Con la ayuda de los proyectos, las empresas pueden reaccionar de manera más rápida y eficiente a las necesidades del cliente.
Presentamos dos métodos comunes de gestión de proyectos:
El método de gestión de proyectos en cascada es lineal
Waterfall es un modelo tradicional en el que la planificación del proyecto y el resultado final se definen con precisión de antemano. El plan se cumple y no es posible cambiar los objetivos. Por ejemplo, el desarrollo de software a menudo ha utilizado un método de cascada lineal paso a paso en el pasado. La ventaja del método es naturalmente la previsibilidad, porque no se desvía del plan y el progreso es fácil de medir. Las desventajas del modelo en cascada son la inflexibilidad y una alta posibilidad de falla en los casos en que hay desviaciones del plan original.
Agile (scrum) es un método ágil de gestión de proyectos
Hoy en día, el método más popular y, a menudo, más efectivo en el desarrollo de software es el moderno "ágil", es decir, el desarrollo ágil. En él, las fases de desarrollo y prueba se repiten constantemente, y los objetivos del proyecto se pueden cambiar sobre la marcha si es necesario. Existen varios métodos ágiles y quizás el más famoso de ellos es el método "scrum". En el modelo lineal tradicional, el producto terminado se entrega al cliente. En los modelos ágiles, el todo se completa lentamente, consta de varias partes y la salida utilizable se entrega continuamente al cliente.
Scrum es por tanto un método ágil y en él todo el proyecto consta de sprints. Como sugiere el nombre, un sprint significa una ráfaga corta u otro período corto similar para el cual se han definido el tiempo y los objetivos de implementación.
Debido al cambio y la agitación en la vida laboral, hoy en día a menudo se acostumbra organizar el trabajo en proyectos. A medida que la sociedad cambia, las empresas también lo hacen, y el trabajo orientado a proyectos ayuda a responder a la demanda de forma más dinámica y ágil. Ayuda a delegar tareas, administrar el trabajo y lograr objetivos.
Una buena comprensión de la gestión de proyectos le permite tener éxito en una vida laboral impulsada por proyectos y le ayuda a elegir las herramientas que mejor se adapten a sus proyectos.
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