La parte racional del cerebro sólo utiliza el 10% del mismo, mientras que la parte emocional utiliza el 90% restante, esto hace imprescindible la educación de las emociones.

La programación neurolingüística es el conjunto de habilidades cognitivas para pensar y actuar de forma efectiva en nuestra vida. La programación neurolingüística, también conocida como PNL, se encarga, pues, del estudio de la conducta humana a partir de la comprensión de las emociones.

Los logopedas son aquellos profesionales que pueden ayudar a la comunicación correcta y a mejorar el habla, sobre todo en niños que presentan dificultades.

 Estudia el cerebro, entendiéndolo como un órgano social capaz, que cambia según los procesos de enseñanza, y aprendizaje, especialmente si lo trabajamos mediante ejercicios lúdicos y terapéuticos.

Fomentar la inteligencia emocional en los niños y niñas es importante para crear hábitos y potenciar habilidades que les ayudarán a desarrollarse personal e interpersonalmente y a tener éxito en la vida.